Hace seis semanas, estuve en el clubhouse de los Piratas conversando con el segunda base del equipo, Neil Walker. Conversábamos acerca de un tema popular en el área de Pittsburgh-la marca de .500, que no superaban los Bucaneros en una temporada completa desde 1992. Walker afirmó que los Piratas estaban más interesados en ganar su división que en simplemente terminar con récord positivo.
"La gente va a leer eso y reírse de nosotros", dijo Walker después. Ahora, seis semanas después de aquella plática, la gente no se está riendo. En una congestionada División Central de
Los Piratas, con marca de 51-45, están empatados con los Cerveceros en la cima, ambos con ventaja de un juego sobre los Cardenales. Increíblemente, la división podría ser de ellos.
Hasta cierto punto, ya ha sido de ellos. Los Bucaneros llevan 10-14 contra equipos del Este, 9-10 vs. conjuntos del Oeste y tuvieron 8-7 en los juegos interligas. Pero ante la competencia de
Ahora bien, hay que hacerse la pregunta del millón, la interrogante que tiene que ponderar el gerente general del equipo, Neal Huntington, antes del 31 de julio, fecha límite para cambios sin que los peloteros pasen por la lista de waivers: ¿Qué tan en serio deberíamos tomar a los Piratas?
Es una pregunta justa, ya que algunos números del conjunto sorprenden y hasta confunden. Andrew McCutchen es el único pelotero de Pittsburgh con OPS (porcentaje de embasarse más slugging) por encima de .800 entre los que tienen turnos suficientes para calificar. Él Walker son los únicos con más de 35 empujadas. Chris Snyder, Ryan Doumit y el venezolano José Tábata siguen lesionados, y el dominicano Pedro Alvarez no ha sido factor alguno y se encuentra en liga menor.
Claro, Alex Presley ha hecho un gran impacto desde que llegó a fines de junio (OPS de .933 en 19 juegos), pero la realidad es que este lineup tiene muchos huecos.
Está de moda señalar a los Gigantes del 2010 como muestra de que si tienes una gran rotación abridora, puedes ser contendiente legítimo sin una ofensiva tan poderosa. Pero hasta esa edición de San Francisco promedió casa media carrera más por partido que estos Piratas, que anotan 3.89 vueltas por encuentro.
Entonces sí, en cierto sentido se entiende por qué uno podría dudar aún de las posibilidades de los Piratas del 2011. Según Baseball Prospectus, Pittsburgh sólo tienen 5.2% de probabilidad de ganar su división. Es más, la publicación pronostica que los Bucaneros terminarán con un juego por debajo de .500.
Pero ahí podemos responder de la siguiente manera: Nadie en marzo tenía a los Piratas en la cima de su divisiónen ningún momento, ni hablar de finales de julio, así que claramente éste es un equipo acostumbrado a disparar los pronósticos. Los Piratas llevan la quinta mejor efectividad colectiva de
Ahora todo depende de Paul Maholm (6-9, EFE de 3.06), Kevin Correia (11-7, 4.04), Charlie Morton (8-5, 3.62), James McDonald (6-4, 4.15) y Jeff Karstens (8-5, 2.34). Y por ahí viene de una lesión en el hombro Ross Ohlendorf, quien empezó la semana pasada una rehabilitación en liga menor. También está esperando su turno Brad Lincoln, quien tiene promedio de carreras limpias de 3.81, 86 ponches y 19 bases por bolas en 101.2 entradas en Triple-A Indianapolis. Una preocupación es el bullpen, que ha carecido de un preparador confiable para el cerrador Joel Hanrahan. Pero además de firmar al veterano Jason Grilli, los Piratas podrían adquirir otro brazo para el relevo.
Lo que sí le conviene al pitcheo de Pittsburgh es una defensa mejorada. Los Piratas están novenos en eficiencia defensiva, según Baseball Prospectus, luego de que el equipo terminara en el último lugar el año pasado. Los Bucaneros promedian .71 errores por juego en el 2011, comparado con .78 la temporada pasada.
Más allá de los números, la actitud del club ha cambiado bajo el mando del manager Clint Hurdle. El ambiente no se parece en nada a lo que fue durante aquellas campañas perdedoras. Dicha actitud fue revelada cuando Walker habló de playoffs al principio de la temporada. Es posible que todo esto sea una ilusión y que Pittsburgh empiece a caer en las posiciones. De ser así, aun podrá decirse que los Piratas progresaron mucho en el 2011.
Por Anthony Castrovince / MLB.com