Seattle Seahawks disputará la Super Bowl el domingo 1 de febrero en Glendale (Arizona) tras batir ayer Green Bay Packers en la prórroga por 28-22. Los vigentes campeones remontaron 16 puntos de desventaja, récord histórico de la NFL en una final de Conferencia, y lo hicieron casi todo en los dos minutos y nueve segtundos finales. Seattle defenderá el título que ganó el pasado año ante el vencedor del New England Patriots-Indianapolis Colts.
Seattle fue un caricatura de sí mismo en la primera mitad. La mejor defensa de la NFL se encontró con un enemigo inesperado: su propio ataque. El quarterback Russell Wilson, cortocircuitado y desbordado por las coberturas rivales, nunca encontró a sus receptores: sus pases fueron interceptados tres veces, facilitó cuatro ofensivas del rival y no logró un primer down hasta el minuto 23 del partido.
Green Bay, más sólido, se las apañó para anotar tres field goals por medio de Mason Crosby, lo que unido a un touchdown de Randall Cobb a pase de Aaron Rodgers le colocaba 0-16 arriba al descanso.
Una jugada de pizarra en el tercer cuarto cambió el panorama y las sensaciones. En cuarto down, Seattle iba a chutar a palos. Quien sujetaba el óvalo, el ‘punter’ Jon Ryan, amagó la colocación del balón, lo agarró y corrió con él ante el desconcierto de los Packers, enviando un pase bombeado a Gary Gilliam en la zona de marca: touchdown, 7-16 y la grada del CenturyLink Field y los Seahawks, reanimados. Último cuarto y esperanzas de remontar.ç
Green Bay no se descompuso. Tras un drive sólido, Crosby anotaba su cuarto field goal para ponerse 7-19 arriba. Una nueva intercepción sobre Wilson a 5 minutos del parecía haber dado el descabello a los campeones. Y entonces obraron el milagro de la resurrección. Primero fue un touchdown del propio quarterback a 2’09”: 14-19. Acto seguido, taquicardia aguda: a la desesperada, Seattle decide ejecutar un onside kick (chut lateral y corto para presionar la recepción rival), a Bostick se le escapó el balón y los Seahawks recuperan la ofensiva. A 1’25”, touchdown de Marshawn Lynch, que con el extra game adicional ponía a Seattle 22-19 arriba. A 19”, Crosby convierte un field goal desde 48 yardas para Green Bay. 22-22, prórroga. Gana el primero que marca un touchdown.
Seattle no tardó nada: una bomba larguísima de Russell Wilson la capturó Jermaine Kearse, desatando la locura.