AUGUSTA -- El sudafricano Charl Schwartzel ganó el domingo el Masters de Augusta con una ventaja de dos golpes sobre Adam Scott y Jason Day tras una última ronda alocada.
Schwartzel, de 26 años, terminó con cuatro birdies seguidos. Acertó un putt de casi siete metros (20 pies) en el último hoyo y cerró su tarjeta con 66 golpes, seis bajo par.
"Para mí es un sueño hecho realidad", admitió el flamante campeón del Masters. "Me ayudó mucho jugar con K.J. Choi porque tiene un estilo de juego similar al mío".
Su total fue de 274 impactos, 14 bajo par, suficiente para negarle a Australia su primer saco verde de campeón. Scott logró 67 golpes y Day, con dos birdies al hilo en el final, sumó 68. Los dos australianos terminaron con 276.
"No puedo haber hecho más de lo que hice hoy", declaró Scott. "Emboqué muchos putts, y jugué realmente bien; Charl simplemente jugó mejor".
Tiger Woods quedó igualado con otros con 278, al no poder aprovechar una gran primera mitad de 31 golpes. El norirlandés Rory McIlroy, líder después de los primeros 54 hoyos, se desmoronó en la ronda final tras anotar 80 golpes.
El argentino Angel Cabrera terminó la ronda con 71 golpes, a cinco del líder. El cordobés desperdició varias oportunidades sobre el green en el transcurso de la última ronda. No obstante, su top ten sigue siendo muy meritorio en una temporada en la cual no le había ido muy bien.
Caso similar al de Woods, que siempre parece agrandarse en el majors, y mostró destellos del jugador que solía ser. Fue una edición emocionante del Masters, en la cual hubo cinco punteros en un momento dado.
Sin embargo, el sudafricano brilló cuando más importaba, y el campeón defensor Phil Mickelson terminó colocándole la chaqueta verde.
MJ