La FIFA advierte a Trump: “No habrá Mundial en EEUU si sigue con el veto migratorio”

Infantino advierte al nuevo presidente de los Estados Unidos que el veto a la entrada al país de ciudadanos de otros países puede dejar a los norteamericanos sin poder organizar nuevamente un Mundial en los próximos años

Muy probablemente un alto dignatario de un país haya conseguido nunca tal unión en contra de tantos representantes y responsables del mundo del deporte. El último en lanzar un mensaje de advertencia por su política de veto a la inmigración adoptada por el presidente norteamericano ha sido el máximo dirigentes de la FIFA, que ha dejado bien a las claras cuál será la postura del organismo de continuar en esa medida el país norteamericano.

No habrá Mundial sino acaba el veto

Gianni Infantino, presidente de la FIFA, realizó unas duras declaraciones en el día de ayer en Londres en las que advertía muy seriamente a Donald Trump de las consecuencias de continuar adelante con su controvertido veto migratorio que impide la entrada a los Estados Unidos a los ciudadanos de hasta seis países de mayoría musulmana.

Infantino recordó que si los Estados Unidos siguen interesados en pujar por la organización de los próximos mundiales, como el del 2026, deberá garantizar en todo momento el libre acceso al país norteamericano de jugadores, entrenadores, árbitros y aficionados con independencia del país del que procedan.


Jarro de agua fría

El anuncio de Infantino lleva un importante trasfondo asociado. Sobre todo por el hecho que de una potencial candidatura de los Estados Unidos es una de las grandes favoritas para albergar la Copa del Mundo FIFA del año 2026, bien sea de manera individual o bien la presente de manera conjunta con alguno de los países colindantes, como México o Canadá.

No es el único deporte que puede verse seriamente afectado por la orden de Trump. Así, además de la posible candidatura de los Estados Unidos para el Mundial de Fútbol FIFA, la candidatura olímpica de Los Ángeles del año 2024 es otra que corre un grave riesgo de quedarse sin opciones de continuar vigente el decreto del nuevo presidente de los Estados Unidos.