Chris Bosh y Dwyane Wade hacen sonreir a la 'Heat nation'

Miami Heat ya no es un aspirante al anillo tras cuatro años siéndolo de forma perenne. Se fue LeBron y el descenso en el rango competitivo ha sido inevitable. Eso sí, Miami Heat es un buen equipo. Sigue Pat Riley como ideólogo y Erik Spoelstra como estratega. Y siguen, se frenó a tiempo la sangría, Wade y Bosh. Con Luol Deng en lugar de LeBron pero, a cambio, menos presión y el deseo de reivindicarse casi cada noche. Y eso hace muy peligrosos a los equipos.

Lo dejó claro Erik Spoelstra: "Llevábamos mucho tiempo esperando este partido, toda la 'Nación Heat' estaba deseando que llegara". En guerra contra el revés que les dio la fortuna en verano, el equipo de Florida arrancó con victoria ante Washington Wizards(107-95), aspirante a ser tercero del Este pero algo cojosin el lesionado Bradley Beal. Con todo, hubo pelea hasta casi el final y antes de triples decisivos de Chalmers y Cole (que anotó 23 puntos). Chris Boshrespondió en pista (26 puntos, 15 rebotes) al contrato gigante que le ha mantenido en Miami y a sus declaraciones de las últimas semanas, con las que ha puesto tierra de por medio e incluso se ha sacudido algunos fantasmas de la era LeBron. Wade, el otro que tiene que dar un par de pasos al frente, también respondió: 21 puntos.

Los Wizards perdieron el rebote ante unos Heat que eran muy débiles en ese apartado, y terminaron enfadados y derrotados perse a los 16 puntos y 11 asistencias de Wall, los 17 de Pierce y los 18 del eterno Wooden. Quizá la mejor noticia fueron los 13 puntos de un Otto Porter que necesita anotación para acercarse a lo que era en Georgetown y lo que le valió el número 3 del draft de 2013: un complemento ideal, en su mejor versión, para Wall y Beal. Sin el escolta y sin los sancionados Blair y Nene, los Wizards se quedaron cortos. Pero van a ser un buen equipo, seguro. Y parece que también lo serán estos nuevos y rabiosos Heat post LeBron.