Brasil, actual subcampeona panamericana, tuvo que esforzarse al máximo para superar a una República Dominicana repleta de calidad en el último encuentro de la primera jornada de voleibol femenino en los Panamericanos de Guadalajara.
Fue un encuentro colosal, un auténtico duelo de titanes entre dos selecciones llamadas a las mayores cotas en este torneo.
Las de Jose Guimaraes, aquí con su mejor versión posible, juegan de memoria y, además, lo hacen de forma vistosa. Atacan con la confianza que les da ser el equipo número uno del ránking mundial y defienden con la tenacidad de quien no da un solo balón por perdido.
Pero las dominicanas no se quedan atrás. Con la energía y vitalidad que las caracteriza, se dejaron la piel en cada jugada de un primer set muy físico, decantado a favor de las brasileñas (25-22) por los abrumadores remates de Jacqueline Carvalho.
Precisamente esta jugadora tuvo que abandonar la cancha instantes después inmovilizada en una camilla tras un golpe fortuito en la cabeza con una compañera de equipo.
El equipo de Marcos Kwiek, a pesar del arrojo brasileño, no se dejó intimidar. Arrancó acertado la segunda manga (0-4), aunque la lesión de la rival pareció despistarlas y cedieron cinco puntos consecutivos para permitir que Brasil retomara el control (6-5).
Las de Guimaraes, recientes campeonas en el Sudamericano de Callao (Perú) y
República Dominicana igualó el duelo tras un apretado final de manga (21-25) pero se desinfló al comienzo de la tercera (10-1), un preludio de la avalancha brasileña en ese set (25-16), maquillada en los últimos compases.
Las brasileñas, lanzadas, aprovecharon la dinámica para torpedear la defensa de las de Kwiek, que a pesar de la tremenda actividad de su líbero Brenda Castillo, entregaron el choque a su rival en unos últimos minutos en los que no encontraron respuestas a los remates de Fernanda Rodrigues.
Publicado por: MJ