Trevor Hoffman ascenso a convertirse en una leyenda del béisbol se puede comparar con la historia de la tortuga y la liebre .
Él casi expulsado de las ligas menores como un jugador de cuadro que no podía golpear o el campo, se convirtió en un lanzador cuya carrera se descarriló cerca cuando una lesión en el hombro minado la velocidad de su bola rápida, se transformó en una de las gracias de todos los tiempos del juego calmantes para el gran a un tono que no exceda ciertos límites de velocidad a otro y más tarde se carrera en el béisbol de guarda registro a pesar de encabezar su propia liga en la única categoría en dos ocasiones.
Sin embargo, Hoffman, capitán del cambio de velocidad, tuvo 12 temporadas con al menos 37 guarda - una carrera de ganar debido a un enfoque lento y constante, al igual que la tortuga de la fábula de Esopo.
El martes Hoffman anunció su retiro después de 18 temporadas, la gran mayoría de ellos como más cerca de los Padres de San Diego, y se estableció para el Salón de la Fama de cinco años, en su primera votación de elegibilidad. Amado por sus compañeros como un amigo y de primer nivel profesional, que deja el juego con 601 paradas, 42 más que nadie en la historia.
Si bien sólo cinco cerradores han placas colgantes en Cooperstown - los escritores han sido especialmente tacaños en la votación para los profesionales de la posición - Hoffman debe convertirse en el sexto por su consistencia notable que incluyó 13 temporadas con un sub-3.00 ERA y 14 con un ERA + de al menos 130, indicando que era por lo menos 30 por ciento mejor que el promedio de la liga los años.
En 1998, en el corazón de la era de los esteroides, cuando Mark McGwire y Sammy Sosa tanto eclipsado la marca de jonrones de larga data, Hoffman tuvo una marca personal de 1.48 ERA para un ERA + de 265.
El prototipo más cercano hoy en día es un fireballer, con una recta alta de los años 90 y una bola de ruptura fuerte en su arsenal. Para la mayoría de su carrera Hoffman lanzó su bola rápida en los años 80 de alto y contó con una curva que sólo era útil. Pero Hoffman apenas necesitan los campos, que no sea para establecer su cambio, que es, sin duda, entre todos los tiempos de este deporte, mejor.
SI.COM
