
Que Lorenzo iba a ser campeón del mundo se sabía desde hace al menos una semana, cuando desgraciadamente Pedrosa se rompió la clavícula en el Gran Premio de Japón. Pero eso no restó ni un ápice de emoción, alegría ni mérito al triunfo del mallorquín, que terminó tercero tras liderar la prueba durante las primeras vueltas.
El español pudo quizá pelear por la victoria, pero echó el freno de mano en las últimas vueltas, consciente de que su sueño estaba ahí, a un centímetro y que una victoria más o menos no le iba a dar mayor gloria. Sí se lo da el título mundial tras un campeonato que ha liderado desde Jerez. Otro día grande para deporte español, al que no se le resiste nada. Entre los Nadal, Gasol, Alonso, Contador, Xavi, Iniesta y compañía se cuela Jorge Lorenzo y también Toni Elías.
En cuanto a la carrera en sí, lo que se vio fue una exhibición de Rossi, que quiso su cuota de protagonismo el día en que entregó el título mundial, quién sabe por cuánto tiempo. Comenzó mandando Lorenzo, que salió muy bien desde la 'pole'. Dovizioso se pegó al español desde el inicio. Ambos marcaron las primeras vueltas rápidas de carrera, hasta que Rossi se quitó de encima a los rivales que tenía delante.
Moto GP.com