
La implantación de la línea de tres puntos en el basket FIBA hace ahora 26 años provocó efectos revolucionarios en la concepción de los espacios y en la sofisticación de las estrategias. Los jugadores dejaron de usar la suspensión de la media distancia y se empezaron a aprovechar más las esquina.
El prototipo de jugador de hoy en día, más grande y más rápido, tiene ya poco que ver con el de hace un cuarto de siglo, lo que ha beneficiado especialmente a las defensas, que en muchos casos llegan a dificultar casi todos los tiros. Eso ha movido a la FIBA a introducir cambios en el reglamento para abrir espacios y tratar de recuperar el dinamismo y la ventaja de los ataques. La solución ha sido retrasar la línea de triple, que a partir de esta próxima temporada pasará a situarse en los 6,75 en lugar de los 6,25.
El Mundial de Turquía es la última competición de elite que usa esta distancia, así como la botella trapezoidal y la ausencia de zonas libres de carga bajo canasta, otras de las novedades del nuevo reglamento aprobado por la FIBA el pasado mes de abril en Puerto Rico. Con el cambio se pretende propiciar un juego más atractivo pero también dar un paso más hacia la unificación con el basket NBA. "El reglamento se cambia a menudo. Este es uno de los cambios más importantes que se han llevado a cabo", asegura el checo Lubomir Kotleba, responsable técnico de la Federación Internacional.
"El porcentaje de triples empezó siendo del 30%, luego fue mejorando", advierte el técnico español Moncho Monsalve. "Muchos equipos jugarán con cuatro hombres abiertos y hacer ayudas al jugador interior, como ocurrió con Scola el otro día en el Argentina-Lituania, resultará complicado", añade.
Habrá que ver si en otras competiciones los tiradores pasarán por el mismo proceso de adaptación. Aunque hay ejemplos para todo, un buen termómetro de lo que puede pasar es la comparación de los porcentajes de tiro de jugadores que en los últimos años han disputado competiciones FIBA y NBA. Los hay como Rudy Fernández, que se ha mantenido estable en torno al 38%. Otros, como el escolta de los Clippers Eric Gordon, han pasado de un 38% en la NBA a un 51% en este Mundial.