MAYAGÜEZ, Puerto Rico -- Más de 4.000 atletas de 31 países a partir del domingo intentarán con sus proezas deportivas dejar en el olvido un accidente ocurrido horas antes de la ceremonia inaugural, que conmocionó a muchos y obligó a los organizadores a postergar los festejos y el encendido del pebetero de los XXI Juegos Centroamericanos y del Caribe.
Al menos cinco personas resultaron heridas luego que una tromba marina provocó la caída de un andamio dispuesto para un espectáculo de luces que engalanaría la ceremonia de bienvenida de los deportistas en el estadio Centroamericano de Mayagüez.
"Por razones de seguridad... hemos tenido que tomar la decisión de aplazar -- no de cancelar -- la inauguración de los Juegos para (el domingo)" y "el encendido del pebetero", dijo Felipe Pérez, presidente del Comité Organizador.
De acuerdo al canal de televisión WAPA América, emisora puertorriqueña que transmite programación de la isla en sistemas de cable en Estados Unidos, el encendido del pebetero se efectuará al mediodía, hora local.
La lluvia y los fuertes vientos también provocaron cortes en el servicio eléctrico en varios poblados aledaños a Mayagüez, el occidente de Puerto Rico, sede principal del más antiguo torneo deportivo de la región.
"La fiesta continúa" dijeron los organizadores en alusión al programa de competencia, que se disputará desde del 18 de julio hasta el 1 de agosto.
"No ha sido fácil pero los problemas se enfrentan y no se esconden", agregó Pérez, que minutos antes visitó el estadio, el principal recinto deportivo de los Juegos, para conocer de primera mano la situación de esa instalación.
AP
