Cleveland elimina a los Bulls con Dellavedova y James

Con un severo 73-94 que estampó el 4-2 definitivo en esta semifinal de la Conferencia Este, los Cleveland Cavaliers pusieron a los Chicago Bulls de vacaciones. Los Cavs funcionaron como una máquina engrasada pese a jugar desde el minuto 15 (35-35) sin su base 'AllStar' Kyrie Irving, que sufrió esguince leve en la rodilla izquierda al pisar a su tremendo compañero Tristan Thompson. Pero la puntilla vino de las manos de Matt Dellavedova, el australiano de Victoria (ni siquiera 'drafteado' en 2013) que tomó en pista el relevo de Irving en la dirección de los Cavs. Ante 22.695 espectadores que hicieron retumbar elUnited Center de Chicago como una caverna rugiente, Dellavedova se instaló en el puente de mando y guió la exhibición de acierto de los francotiradores de los Cavaliers con 19 puntos cruciales (7/11 en tiros, 3/6 en triples), en pleno corazón de la tensión. "Tiene un tiro mágico y, además de eso, hay que decir de él que no comete un solo error, que juega duro como nadie y que es el compañero que todos querrían tener", dijoLeBron James sobre Dellavedova, ya a partido concluido. James, que se alternó con Dellavedova en la subida del balón de los Cavs rozó el 'triple doble': 15 puntos, 7/23 en tiros, 11 asistencias y 9 rebotes. Los Cavaliers regresan a la final del Este, que no pisaban desde 2009. Se enfrentarán al ganador de la serie Atlanta-Washington (3-2 para Atlanta). Eventualmente, Cleveland gozaría de ventaja del campo ante los Wizards, pero la perdería de salida ante Atlanta Hawks.
La defensa exterior de los Cavs, que alternó fuerte asignación individual con zona 1-2-2 ajustada, rebajó brutalmente el porcentaje del tiro exterior de los Bulls a un ínfimo 20% en triples: 4/20... con 1/10 en el descanso, mientras que Cleveland subía en los tiros de tres puntos hasta el 44,4%: 12/27. Los Cavaliers también se impusieron, obviamente, en el acierto total en tiros (41,8%-37,5%) y acapararon los rebotes en una demostración bajo tableros: 53-32 para Cleveland en la cuenta final de capturas. "Ahora todo se trata de corazón, esfuerzo, determinación, deseo y quererlo más de lo que lo quieren ellos. No sería prudente jugar el número habitual de minutos, puede que después de mañana... ya nada quede", había anticipado Pau Gasol antes de salir a jugar.
Al fin, Gasol intervino, con claras precauciones y racionamiento de minutos, durante 23:32, con ocho puntos(3/8 en tiros) y cinco rebotes. A los cinco minutos, los Bulls vencían por 12-6 con Pau machacando en transición: el gas no iba a durar por mucho más tiempo al club de Chicago. Taj Gibson jugó después de que, tras la revisión de su Falta Flagrante 2 que le valió la expulsión en el quinto partido, la NBA adjudicara una técnica a Dellavedova y excusara como 'provocada' la patada de Gibson a Dellavedova. La participación del agitador Gibson, desquiciado por la energía de Tristan Thompson, fue tan testimonial como dos puntos, dos rebotes y cuatro faltas en 15:25. Con 20 puntos y cinco rebotes en 43:31 (8/22 en tiros), Jimmy Butler fue el máximo anotador de los Bulls, forzó en la defensa ante James y probablemente evitó una paliza mayor a favor de Cleveland. En 35:34, Derrick Rose se detuvo en 14 puntos (7/16 en tiros, 0/0 en tiros libres, 0/3 en triples) y seis asistencias. Niko Mirotic cerró su año de 'rookie' (segundo mejor novato en la NBA 2014-15) con siete puntos (3/8 en tiros) en 13:05... y una falta flagrante Tipo 1 sobreShumpert en el minuto 19 y con 40-41... que hizo arrancar un parcial explosivo de 2-17 a favor de Cleveland. Desde el incidente de Irving, los Cavaliers golpearon con un 7-23 gracias a Dellavedova, James, el propio Shumpert (13 puntos, 2/4 en triples, siete rebotes), J. R. Smith (12 puntos, 3/6 en triples, ocho rebotes)... y Tristan Thompson, el nuevo y dinámico Rodman del Siglo XXI que emerge en Cleveland: 13 puntos (4/11 en tiros) y 17 rebotes en 40:03, pese a una monumental costalada tras aterrizaje forzoso en el segundo cuarto que le obligó a cubrirse el hombro izquierdo con carretadas de hielo.
El primer cuarto ya finalizó con 31-33 para Cleveland. En el segundo, los francotiradores de Cleveland vieron diana para disparar a placer y con puntería justo a partir de la lesión de Irving: seis puntos tras 12:10 en juego. El ataque de Chicago se estrellaba ante las alternancias defensivas de los Cavs. "Siempre volvemos atrás, nos protegemos en defensa, siempre bajamos atrás más concentrados aún que en ataque", imploraba David Blatt a sus Cavs, que solo permitieron a Chicago dos canastas en los últimos ocho minutos de la primera parte. El descanso llegó con 44-58 para unos Cavaliers dominantes. Doug Collins, extécnico de los Bulls y medalla de plata olímpica en 1972, observaba en la retransmisión de ESPN: "LeBron está dominando el partido sin tener que anotar".
Nadie anotó en los tres primeros minutos de la segunda parte... que en seis minutos presentaba un 0/9 en tiros para los Cavs... y un 1/10 para los Bulls. "La puerta aún está abierta para los Bulls, pero el aro está cerrado", matizaba Jeff Van Gundy. LeBron subía el balón... pero Dellavedova rompió la sequía de Cleveland con el 46-60 del minuto 30. Pronto, Dellavedova y 'King' James fueron abriendo quirúrgicamente, como con bisturí los ajustes zonales de Chicago, donde Gasol y Rose ya apenas aparecían: era 48-67 en el 34, con LeBron imponiéndose a la defensa de los Bulls por dentro y por fuera... y Smith ametrallando con triples profundos de ida y vuelta, 'back to back'. Un Butler al límite, logró mantener a los Bulls con 12 de los 16 puntos de Chicago en el tercer cuarto, cerrado con 60-73.
Siete puntos de Dellavedova y dos de LeBron James abrieron el último cuarto con 0-9 en tres minutos, de paso para el 62-84 del minuto 40 que ya era un abismo insalvable. Los Cavs ya 'pinchaban' el balón y a 5:39 del fin, con 64-89, Pau Gasol se sentó definitivamente en esta temporada 2014-15, con rictus que mezclaba amargura, dolor y decepción. Un minuto después, en el 44, Cleveland llegaba hasta el 66-93 y controló hasta el fin, mientras a Tom Thibodeau apenas le salían las palabras en el banquillo de los Bulls... en donde Fred Hoiberg, ex jugador de Chicago y actual entrenador de Iowa State, se dibuja como un candidato con buenas credenciales. Eso, cuando los Chicago Bulls ya están de vacaciones y Cleveland espera a los Hawks o a los Wizards. Lo mejor: los Cavs han demostrado que puede ganar sin Love, sin Kyrie Irving... y con Dellavedova. Pero que no falte LeBron.